Universidad Católica Luis Amigó

Programa de Permanencia con calidad

Otros elementos importantes sobre introducción a la vida laboral

Publicado por Webmaster el 21/9/2016 (468 lecturas)

El ejercicio de una profesión no es fácil, implica una serie de cambios para los cuales se debe estar preparado, teniendo en cuenta el campo en el que cada quien se quiera desenvolver. Se hace énfasis en que se debe estar preparado para desenvolverse adecuadamente en cualquier carrera porque las características del medio laboral exigen que cada vez el nivel de preparación de los profesionales sea más alto.

Ya sea que el profesional quiera encontrar empleo en una determinada empresa o que su objetivo sea trabajar por cuenta propia, es muy importante tener en cuenta no solo la actitud hacia el campo profesional en el que se desempeñará, sino también la aptitud con la que se cuente para desempeñarse allí; es decir, no basta con que una profesión nos guste y nos vaya bien en ella desde el punto de vista teórico, hay que tomar en consideración que seamos idóneos para desempeñarla. Por ejemplo, una persona que decide estudiar medicina y en la teoría le va muy bien, no tiene problemas para entender y explicar todos los términos y procedimientos que se refieren a esta profesión; pero al momento de desenvolverse en el terreno de lo práctico se encuentra con que le causa temor la vista de la sangre. También el caso de una persona que se ve a sí misma como periodista, su redacción y su forma de expresarse son claras, conoce los pormenores del ejercicio de la profesión, pero no se siente cómodo en compañía de desconocidos o le es difícil socializar. Los dos casos presentados anteriormente nos ponen de manifiesto que al elegir una carrera para desempeñarse en ella, hay que tener muy en cuenta la manera en que nos desenvolveremos en ella una vez nos hayamos graduado.

Aparte de lo anterior, es también de capital importancia estar constantemente actualizados acerca de los avances en la carrera de la cual nos hayamos graduado, pues como ya se mencionó anteriormente, los estándares de exigencia para todas las profesiones son cada vez más altos, lo que implica que si un profesional no se actualiza cada día, su conocimiento va quedando obsoleto y en poco tiempo perderá vigencia lo que le llevó varios años en la universidad aprender.

Ahora bien, la actualización constante no se refiere solo a los temas concretos de una determinada profesión, sino que también engloba estar al tanto de los cambios que día a día y más aún, minuto a minuto suceden en nuestro país y en el mundo, puesto que ninguna profesión está desligada de los acontecimientos del orbe. Y esa actualización constante implica también conocer en alguna medida los temas que abordan otras profesiones, ya que cada vez más, la interdisciplinariedad se toma el campo laboral. Esto último quiere decir que ya no es válido el ejercicio de la profesión en solitario, pues ahora se ha comprendido que acerca de un mismo tema distintas profesiones tienen, cada una desde su ángulo, aportes que hacer, y que cada profesional debe interactuar y compartir experiencias con profesionales de distintas carreras.

En el orden de ideas del párrafo anterior, el perfil del profesional debe mostrar entonces competitividad, preocupación por capacitarse en las áreas afines con su carrera y desarrollar una visión de conjunto que le permita articular sus conocimientos con los retos que le toque asumir en su labor diaria. Es importante también tener en cuenta que la presentación personal es una llave que nos abre puertas y por eso la corrección en el vestir y las buenas maneras siempre serán un agregado que influya en la percepción que los demás se formen de nosotros y de la labor que desempeñamos.

Como parte de ese proceso de cambio al que se enfrenta el mundo, y con él nuestro contexto sociocultural, está la globalización, y esa globalización nos impulsa a buscar alternativas de comunicación con otras culturas, para aprender de ellas, y es ahí donde aparece la importancia de dominar una segunda y hasta una tercera lengua. Esa segunda lengua, al menos en este momento histórico, debe ser el inglés, pues se ha constituido en el lenguaje universal, el idioma que nos abre las puertas de esa sociedad globalizada y multicultural. Es además la lengua en la que está consignada la mayor parte de la información en Internet, y es por eso que necesariamente si se quiere estar al

tanto de los avances en cualquier campo profesional hay que recurrir a publicaciones realizadas en esta lengua.

Además de lo anterior, y como parte de un proceso de formación integral, tanto dentro como fuera del ámbito académico, hay que considerar que no basta con ser un excelente profesional en cualquier campo, es necesario también el crecimiento como persona día a día. Ese crecimiento como persona implica una adecuada interacción con los demás, disposición para el trabajo en equipo, capacidad para la resolución de conflictos, asertividad para formular y recibir críticas constructivas, entre otros aspectos.

Como se ha visto hasta aquí, ser profesional es solo el comienzo del aprendizaje en cada carrera, pues el conocimiento es algo que se debe buscar cada día, y ser profesional implica también una gran responsabilidad, tanto a nivel personal como social. Esto hace parte de la ética del profesional de cualquier disciplina, y esa ética también pasa por ejercer la profesión con respeto por las personas que nos rodean, tomándolas como fines en sí mismas y no como medios para el logro de objetivos. Cada profesión tiene determinados planteamientos acerca del comportamiento ético en el ejercicio profesional, y es adecuado que las personas que eligieron determinada carrera los tengan en cuenta, pero también es importante el comportamiento ético como tal, teniendo en cuenta no solo la ética profesional, sino además una conducta y unas normas de vida que muestren al profesional como un ejemplo a seguir.

Es cada uno entonces quien decide qué tipo de profesional quiere ser.