Juan Esteban Calderón Urrego estudiante de psicología décimo semestre de la Universidad Católica Luis Amigó, se encuentra realizando su segundo nivel en las prácticas profesionales en la UCASAL (Universidad Católica de Salta), en la ciudad de Salta, Argentina.

Para él su intercambio consiste en la oportunidad de culminar su último semestre de la carrera con la realización del segundo nivel de las prácticas profesionales en Argentina, “Inicialmente quería profundizar mis competencias y habilidades en el ámbito clínico, pero al llegar a la UCASAL, me manifestaron que es la única universidad que cuenta con prácticas en 5 ámbitos diferentes (Educativo, Organizacional, Clínico, Jurídico-Forense y Comunitaria), me animaron a agarrarlas todas para tener un amplio conocimiento en el área de la psicología desde diferentes perspectivas, pero al tener poco créditos académicos disponibles, solo pude escoger tres y para mí esto ha sido una experiencia inolvidable”.

Algunas de sus expectativas ha sido conocer otros discursos desde su saber y poder tener un acompañamiento activo a partir de las experiencias de los profesionales con los cuáles se iba a encontrar. La motivación para realizar el intercambio en dicho país sin duda fue el amplio conocimiento en la Psicología, “Recuerdo incluso que la mayoría de los textos que leía en el aula de clase provenían de Buenos Aires, Argentina y esto reafirmaba mi interés por querer venir a instruirme aquí, quería conocer un poco de su cultura, costumbres y hermosos paisajes, cosas que hasta el momento en ninguno de los casos me ha decepcionado; he podido lograr cada uno de los objetivos por el cuál vine a este lugar y también estoy feliz porque esto logra aportar significativamente a mi crecimiento profesional y personal”.

Éste es el segundo intercambio para Juan Esteban, la primera vez fue a Perú debido a su primera profesión como Paramédico, de esta manera, esta experiencia le reafirma el hecho de que realizar un intercambio es completamente enriquecedor, “Lo recomiendo, porque gracias a ello te permites conocer otros lugares, ampliar tu panorama con respecto al modo en que vives, realizar nuevas amistades y -una de las cosas más difíciles pero maravillosas- aprender a convivir contigo mismo”.

Más que la OCRI, le agradece a la universidad en general, “Estoy muy conforme con el acompañamiento porque han estado pendiente de mi estado de salud tanto físico como psicológico, agradezco de antemano esta oportunidad que me han brindado de poder cumplir con mis metas y objetivos personales, sin la ayuda de la OCRI no podría estar donde estoy ahora mismo y el interés y la preocupación por mi bienestar ha sido un aspecto que considero importante resaltar”.

Hace la invitación a que cualquier persona tenga la oportunidad al menos realice un intercambio en sus vidas, debido a que son experiencias transformadoras que brindan demasiadas herramientas y recursos a nivel personal como profesional, “No miento al decir que en ocasiones el estar fuera de casa, alejados de la familia y amigos puede ser difícil, pero luego de un tiempo comienzas a darte cuenta que al haber tomado esta decisión, marca un antes y un después en nuestras vidas e impacta de manera positiva en cada una de nuestras experiencias y admito que el cambio siempre genera miedo pero al final resulta siendo transformador”.

Finalmente, Juan Esteban comparte la siguiente frase “La vida es demasiado corta como para desperdiciar un segundo en ella” incitando así, a tomar riesgos y a salir de la zona de confort.