•  Estudiantes llevan su conocimiento al territorio

Durante la jornada, los futuros psicólogos pusieron en práctica los conocimientos adquiridos en el aula, trasladando la teoría al territorio mediante estrategias pedagógicas orientadas al fortalecimiento del bienestar emocional y la salud mental en contextos educativos. A través de dinámicas participativas, charlas interactivas y ejercicios colaborativos, se abordaron temáticas clave como el reconocimiento de las emociones, la importancia de las rutinas saludables y las formas efectivas de afrontar la presión académica y social que viven los adolescentes.

Uno de los logros más destacados de la jornada fue la construcción conjunta de espacios de confianza donde los jóvenes se sintieron escuchados, comprendidos y protagonistas de su propio proceso. Este enfoque comunitario permitió no solo brindar herramientas útiles, sino también abrir un diálogo genuino sobre las problemáticas que enfrentan los adolescentes en sus entornos escolares y familiares.

La actividad fue valorada positivamente tanto por los participantes como por las autoridades educativas locales, quienes reconocieron la importancia de generar este tipo de encuentros para fortalecer el tejido social y promover una cultura del cuidado emocional. Asimismo, se destacó la actitud proactiva y empática de los estudiantes universitarios, quienes demostraron un alto nivel de compromiso y sensibilidad frente a las realidades del territorio.

Desde la coordinación académica del programa de Psicología, se resaltó que este tipo de experiencias fortalecen no solo las competencias profesionales de los estudiantes, sino también su conciencia ética y social. La psicología comunitaria, en este sentido, se posiciona como un campo clave para acompañar procesos de transformación y empoderamiento desde una perspectiva inclusiva y participativa.

Porque la psicología no solo se estudia, también se vive, se comparte y se proyecta al servicio de las comunidades.